“Recuerdo mi primer día de clase, en marzo de 1962. Había terminado mi escuela primaria en la Quintana. Comenzaba mi escuela secundaria en el ICEI. Todo era expectativas y nervios. Tenía mi primer uniforme de saco azul y pantalón gris y una elegante corbata azul. Había dejado los pantalones cortos y comenzaba a usar los largos. Eran las 8.45 de la mañana. Tocó el timbre. Mi preceptor Carlitos Serrano nos hizo formar en el segundo patio de aquel viejo caserón de General Paz 531. Todos elegantemente vestidos y peinados. Escuchamos las estrofas del Himno Nacional y del ICEI. Luego nos dio la bienvenida Ida Ema Sgrosso, con un gesto adusto y mucha seriedad, pero con un gran corazón. Luego unas pocas palabras de Don Emilio Descotte con su hermosa cabellera y sus bigotes blancos, ferviente defensor de la democracia y de las libertades. Así partimos a la primera hora de clase dada por nuestro querido Guillermo Bibiloni. Así marchamos temerosos a nuestra aula Mario Falconi, Antonio Monge, Carlos Aguirre, Adriana Ueltschi, María Marta Iriarte, Silvia Insúa, Julio Figueredo, entre otros. Así recuerdo mi primer día de clase de cinco años inolvidables. Luego de muchos años, mis nietos, Guadalupe y Facundo, también llegan al querido colegio para hacer carne propia ese lema tan breve y tan rico SER y SABER, que me ha guiado toda mi vida y ahora ilumina el camino de mis nietos. Siempre los guardo en mis afectos y estarán en mi corazón”.
Un grupo de ex alumnos que cursaron sexto grado en 1966 conmemoró otro aniversario con una visita que hicieron hace unos días.
Recorrieron las instalaciones de la institución, mantuvieron charlas con los actuales estudiantes. Previamente se reunieron para compartir fotos históricas y nuevas anécdotas.
“Para todos nosotros fue muy emocionante haber ido al colegio nuevamente” dijo Rodolfo Zalba, quien viajó especialmente desde Ushuaia.